FORO DE PREPARACIÓN AL ENCUENTRO MUJERES QUE TEJEN LA VIDA

Marzo 2 - 17, 2009 - San José de Costa Rica

REFLEXIÓN EN RED

COMENTARIOS... SENTIMIENTOS... PENSAMIENTOS... INTUICIONES...

DOCUMENTOS TERESIANOS: Diciembre del 15 al 21

Constituciones, XV Capítulo General, Propuesta Educativa Teresiana, Proyecto Formativo, Aporte del CIT Educamos Educándonos.

• ¿Cómo nos situamos con relación a lo que estos documentos expresan sobre la perspectiva de género? Cuestionamientos, luces, invitaciones, deseos…

Iniciando caminos: Primeros pasos en teoría de género. Diciembre del 22 al 28

FELIZ NAVIDAD!!!
• Diferenciar los conceptos sexo y género. Buscar un ejemplo de la vida cotidiana que posibilite comprender los conceptos.
• Identificar en tu formación: infancia, adolescencia, formación cristiana y/o de vida religiosa… momentos en que te formaron como niña/mujer. Considerar la asignación de género, la identidad y el rol de género. Seleccionar algo de esto que te gustaría compartir.
• Lee las definiciones de patriarcado. Busca alguna otra. Prepara un comentario.

Iniciando caminos en la relectura bíblica. Diciembre 29 al 4 de enero

FELIZ AÑO NUEVO!!!!
• Destaca 4 ideas clave para releer los textos bíblicos a partir de esta perspectiva y comparte por qué crees que son fundamentales.

Un artículo de una de las Revistas RIBLA. Del 5 al 11 de enero

• ¿Cómo relacionas el artículo con la temática de género?
• ¿En qué medida el artículo apunta a una reflexión sobre relaciones de género donde prevalezca la equidad?
• ¿Hasta qué punto el artículo invita a pensar las relaciones de género junto con otras relaciones: raza, clase…?
• Destacar un elemento nuevo (metodológico o de contenido) que te llamó la atención en la lectura del texto y que significa un aporte en la lectura de otros textos de la Biblia.
• ¿Qué ha sido más significativo para ti en tu proceso de acercamiento e interpretación de este texto?

Relaciones de género en las iglesias (1). Enero 12 a 18

• Comparte tus resonancias ante lo que has leído, piensa también en tu propia experiencia a nivel eclesial.

Otro de los artículos de una de las Revistas RIBLA. Enero 19 - 25

• ¿Cómo relacionas el artículo con la temática de género?
• ¿En qué medida el artículo apunta a una reflexión sobre relaciones de género donde prevalezca la equidad?
• ¿Hasta qué punto el artículo invita a pensar las relaciones de género junto con otras relaciones: raza, clase…?
• Destacar un elemento nuevo (metodológico o de contenido) que te llamó la atención en la lectura del texto y que significa un aporte en la lectura de otros textos de la Biblia.
• ¿Qué ha sido más significativo para ti en tu proceso de acercamiento e interpretación de este texto?

Relaciones de género en la iglesia (2) pp. 24-25, 31-32. Enero 26 a Febrero 1

• Comparte algo con relación a las identidades de género en la iglesia. Roles de hombres y mujeres, experiencias que nos han hecho sentirnos valoradas/os, respetados/as o al revés…
• Comenta la frase: LOS DERECHOS HUMANOS SE CONVIERTEN EN DERECHOS HASTA QUE LOS EJERCITAMOS… teniendo en cuenta la experiencia de las mujeres en tu contexto y más allá del mismo.

Relaciones de género en la iglesia (2) pp. 34 - 35, 36 - 41. Febrero 2 al 8

• Comenta sobre aspectos de tu vida y de otras mujeres que están “desempoderados”, sobre las propias fortalezas y de otras mujeres que son formas de poder que podrían desplegarse a las áreas de nuestra vida que lo necesitan. Imagina un plan de recuperación de espacio de poder que hemos cedido y la forma de poder que deseamos utilizar en las relaciones. Puede ser a nivel social, familiar, comunitario, eclesial…

Relaciones de género en la iglesia (2) pp. 58 - 63. Febrero del 9 al 15

• ¿A qué te sientes invitada con relación a la realidad de violencia que se vive en nuestro mundo? ¿En tu contexto? En la iglesia, ¿reconoces algún/as realidades de violencia?

Relaciones de género en la iglesia (2) pp. 64 - 73. Febrero 16 a 22

• A partir de lo leído, comenta sobre nuestra realidad eclesial a nivel institucional tanto en los ambientes locales como en los nacionales y supranacionales. Y déjate soñar algo alternativo…

pequeña publicación de tu contexto con relación al tema de género... Febrero 23 a Marzo 1

• Comparte los cuestionamientos que se han despertado en ti al leer la publicación, las intuiciones que han brotado, los sueños que se han despertado… y si puedes, ¿cómo educarnos y educar desde esta perspectiva?

1.30.2009

RELACIONES DE GÉNERO EN LA IGLESIA

SEMANA DEL 26 AL 1 DE FEBRERO

RELACIONES DE GÉNERO EN LA IGLESIA.


EN LA IGLESIA COMO INSTITUCIÓN SE MANIFIESTAN DESEQUILIBRIOS EN LAS TAREAS ECLESIALES Y LA TOMA DE DECISIONES. SU ESTRUCTURA JERÁRQUICA Y PIRAMIDAL QUE HA SIDO DISEÑADA CON SELLO MASCULINO, MANTIENE A LA MUJER EN NIVEL INFERIOR FRENTE A LOS VARONES, ESPECIALMENTE ANTE LOS CLÉRIGOS. A PESAR DE ESTA REALIDAD, HE TENIDO OPORTUNIDAD DE TRATAR CON SACERDOTES, QUE RECONOCEN LA DIGNIDAD, PAPEL Y TRABAJO DE LA MUJER DENTRO DE LA IGLESIA, INCLUSO RECONOCIENDO DEFICIENCIAS QUE COMO SACERDOTES, ELLOS TIENEN CON EL PUEBLO FIEL. EN ALGÚN MOMENTO HASTA DISCULPAS HAN PEDIDO POR LA INEQUIDAD DE GÉNERO EXISTENTE. DEBO RECONOCER QUE SON LOS MENOS Y NO LOS MÁS.

RESPECTO A QUE LOS DERECHOS HUMANOS SE CONVIERTEN EN DERECHOS HASTA QUE LOS EJERCITAMOS, REALMENTE ES ASÍ. EN EL TALLER REALIZADO CON MUJERES DE UN GRUPO DE ORACIÓN, TOMAMOS CONCIENCIA, CÓMO ALGUNOS DERECHOS EN LA FAMILIA, LOS TENÍAN CLAROS, PERO POR MIEDO A EMPEORAR SUS RELACIONES, NO SE DECIDEN A EJERCITARLOS. TAMPOCO FAVORECE EL EJERCICIO DEL DERECHO, LA MANIPULACIÓN DE LAS LEYES, SEGÚN LOS INTERESES DE LOS POLÍTICOS GOBERNANTES. HAY LARGO CAMINO POR ANDAR.

TERESA DE JESÚS

1.26.2009

RELACIONES DE GÉNERO EN LA IGLESIA (2)

SEMANA DEL 26 de enero al 1 de febrero (Teresa del Pilar)

Ø Identidades de género promovidas socialmente (páginas 24- 25) y reconociendo derechos (páginas 31- 32) del libro: “Relaciones de Género en la Iglesia.”

Ø Comparto algo con relación a las identidades de género en la iglesia. Roles de hombres y mujeres, experiencias que nos han hecho sentirnos valoradas/os, respetados/as o al revés…


Aunque las experiencias que abundan con relación a las identidades de género en la iglesia son aquellas en las que una se ha sentido no valorada, creo que sería justo reconocer también otras situaciones más positivas y esperanzadoras. Generalmente son los Jesuitas y algunos, contados Obispos, los que son capaces de reconocer a las mujeres con sujetos de derechos dentro de la Iglesia. Cuando hablo de derechos me refiero a aquellos que podrían empoderarnos de modo recíproco a los de los hombres en sus ministerios, responsabilidades y poder de decisión.

Hay pastores cercanos, fraternos, dialogantes, que nos valoran no sólo por nuestro “servicio”, sino por lo que somos: mujeres consagradas. No obstante, esta valoración muchas veces se mantiene en el plano del silencio, sobre todo cuando surgen conflictos con otros pastores. Difícilmente se la juegan a favor de las más pobres y marginadas, que, en este caso, somos siempre las mujeres – consagradas o no. Somos nosotras las que finalmente tenemos que retirarnos (por ejemplo; de una obra) cuando son “ellos”, a todas luces, los que han provocado situaciones críticas. Ah, perdón, tenía que hablar experiencias positivas.

Hay sacerdotes incondicionales, abiertos, fraternales con los cuales podemos contar para la celebración de los sacramentos y el acompañamiento espiritual tanto a las hermanas como a los alumnos y alumnas. Están ahí, de manera discreta, sosteniéndonos con su modo de ser y de estar, ayudándonos a resistir, a soñar y a forjar los cambios.

En nuestra misma Congregación, una se siente acompañada, empujada, contenida, respaldada… en la búsqueda y realización de estos nuevos modos de estar en la sociedad y en la Iglesia. Un ejemplo concreto, la programación y realización del encuentro en Costa Rica.

Ø Comento la frase: “Los derechos humanos se convierten en derechos hasta que los ejercitamos…” teniendo en cuenta la experiencia de las mujeres en mi contexto y más allá del mismo.

Los derechos humanos se convierten en derechos humanos hasta que los ejercitamos significa, básicamente, como decía Ignacio Ellacuría, el Jesuita asesinado en el Salvador, que ellos son, ante todo, de supervivencia. Esto es: derecho a la vida, al trabajo digno, al descanso, a la alimentación, al descanso, a una casa digna… No existen, pues, derechos humanos abstractos, éstos han de situarse en lo concreto, porque nacen de situaciones vitales, de la experiencia misma.

De ahí que no existen derechos humanos como tales, sino derechos humanos del hombre y derechos humanos de la mujer. Muchas veces bajo la sustantivación de la palabra “humanidad” se esconden los derechos básicos, los vitales, propios de cada género. He aquí el riesgo de llamarlos sólo de manera genérica, hace falta especificarlos, abajarlos, situarlos, ejercitarlos…

Ejercitar los derechos de las mujeres significa usufructuar el derecho al estudio, el derecho a ser sujetos de nuestra historia y no meros objetos, el derecho a tener la misma oportunidad de remuneración que los hombres, derecho a escoger nuestra propia ropa, a cómo cortarnos el pelo, a mover libremente nuestro cuerpo… Derecho a ser escuchadas, a ser amadas y correspondidas, a pensar, a hacer filosofía, a escribir libros y publicarlos, a conocer nuestros derechos…

Hacerme presente en fecha muy significativa

Hola a todas .Aunque llevo días queriendo ENTRAR para saludaros, me es imposible porque mi tiempo dedicado "sobre todo a mujeres "(hermanas de mi comunidad y Provincia)no me da para PARARME todo lo que desearía.
Si quiero que sepan que estoy feliz de participar en el Foro.
Voy preparando material para llevar.Hace unos días participé en un encuentro formativo de mi provincia con el tema "mujeres en Éxodo" que me ha ayudado a clarificar ideas:
. Partimos de la realidad en la que nos encontramos en este tema y me hice más consciente de lo arraigado que tenemos valores patriarcales.
.Tomé conciencia de la desigualdad grande que existe aún.
.Existen paradigmas que están caducos
.Debemos hacer RESISTENCIA no desde la rebeldía infantil sino desde la solidaridad y la lucha por causas nobles.Como ejemplo desde la Palabra : Las parteras de Egipto, la hermana y la madre de Moisés.Opción por la vida por encima de normas , leyes y reglas.
.Como mujeres , mirarnos más desde las posibilidades que desde las carencias.
.Nos acercamos a figuras Bíblicas que nos iluminaron por la relación de confianza, de ayuda de empoderamiento:María e Isabel, Ruth y Noemí...
¡Qué suerte poder enriquecernos esos 15 días en Costa Rica!
Las recordaré en fecha tan significativa para nosotras.
Agradezcamos a S.Enrique la gran CONFIANZA en la MUJER.
Hasta pronto.

1.25.2009

RELACIONES DE GENERO EN LA IGLESIA (2A)

Semana del 26 de enero al 1 de febrero

Realizando el taller de esta parte de “Relaciones de Género en la Iglesia”, me ha venido a la mente un texto escrito por una mujer española del siglo XIX. Se llama Concepción Arenal, no sé si la conocen. Se viste de hombre para poder estudiar en la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense de Madrid. El texto es parte del Capítulo 8 de uno de sus libros: “La mujer del porvenir”. En el Capítulo 8 habla sobre los oficios y profesiones que pueden ejercer las mujeres, critica la posición de quienes sostienen que la aptitud intelectual de la mujer es inferior al varón, con fina ironía dice que “aun concediendo por un momento que la mujer no pudiera remontarse a las más elevadas esferas del pensamiento” no puede deducirse de esto que sea incapaz de ejercer cualquier profesión. A continuación el texto que he seleccionado:
“Observemos lo que saben y lo que hacen un farmacéutico, un abogado, un médico, un notario, un catedrático, un sacerdote, un empleado, vulgares, de la talla común; observemos bien, sin preocupación, en conciencia, y digamos si no puede una mujer aprender lo que ellos saben y hacer lo que ellos hacen.”
“Siendo la mujer naturalmente más compasiva, más religiosa y más casta, nos parece mucho más a propósito para el sacerdocio, sobre todo en la Iglesia católica, que ordena el celibato del sacerdote y la confesión auricular. Muchos inconvenientes de esta confesión, hecha entre personas de diferente sexo, desaparecerían si la mujer pudiera ejercer el sacerdocio, cuyos deberes están tan en armonía con sus naturales inclinaciones. Instruir a los niños, enseñar a los ignorantes cosas buenas, sencillas y precisas; acompañar a los enfermos; auxiliar a los moribundos; compadecer a los desdichados; consolar a los tristes; hablar a todos de Dios, en quien cree con tanta fe, son cosas muy propias del sexo compasivo y piadoso. No sabemos si entre las mujeres habría muchas doctoras que causaran admiración; pero de seguro habría muchos ejemplos que imitar y muchas virtudes que harían amar la religión que las inspiraba. Sintiendo se hace sentir; la religión es principalmente un sentimiento, y la mujer su más natural y fiel intérprete. Capacidad le sobra para adquirir la instrucción indispensable; no es un monstruo ni está fuera de las leyes de la armonía del universo, donde se ve que si Dios concede pocas veces sus altos dones, distribuye con mano pródiga todo lo que es necesario.”
“Esto que vamos diciendo parecerá muy extraño, muy absurdo, y probablemente será para algunos poco piadoso; hemos meditado mucho sobre la materia, y nos parece más fácil hallar chistes para ridiculizar nuestras ideas que razones para combatirlas. El ridículo tiene su esfera de acción activa, pero limitada, y no llega a las regiones del entendimiento, en que de buena fe se busca la utilidad por las vías de la justicia. El ruido de las carcajadas pasa; la fuerza de los razonamientos queda: toda persona sensata sabe que suelen pensar poco los que se ríen mucho, y no debe parecerle bien que se traten con risa las cuestiones de un mundo en que se llora tanto. Por lo que hace al anatema que tal vez alguno quiera lanzar contra nosotros, le conjuramos diciendo: que nuestras opiniones tendrán de poco piadosas todo lo que tengan de erróneas; pero que si tenemos razón, no podemos tener culpa: el error es impío, la verdad es santa.”
“…Si las observamos de cerca, no hay profesión en cuyo ejercicio no entre por la mayor parte, o por mucho, la moralidad del que la ejerce. ¿Y no podría desempeñarlas la mujer, más sensible, más compasiva, más religiosa, más casta, más moral, en fin?”
Desde otro contexto, con otras palabras y con mucho más recorrido de la sociedad en el reconocimiento del papel de las mujeres gracias a la lucha de los movimientos feministas… podríamos seguir manteniendo la misma apreciación de esta mujer con respecto a las relaciones de género en la iglesia.
En una estructura jerárquica piramidal como es la de la iglesia, es evidente que las mujeres ocupamos un lugar inferior. Por ser mujeres y por no ser clérigos. Las consecuencias de ocupar este lugar se reflejan no sólo en la posibilidad de cualquier ministerio ordenado sino en otros ámbitos jurídicos a los cuales las mujeres no tenemos acceso mientras que los varones clérigos sí.
Hoy se nos invita a compartir alguna experiencia personal… yo las tengo desde que era muy joven, antes de entrar a la Compañía. Me sentaba mal que en la parroquia nos buscaran sólo para el coro, la catequesis o para actividades de este estilo. Me costaba entender que siempre tuviéramos que escuchar homilías de varones sacerdotes sobre todo cuando eran aburridas y sentías que no te decían nada. Recuerdo a un sacerdote joven que nos invitó a compartir después del Evangelio, en vez de la homilía clásica, le llamaron la atención porque eso le correspondía al sacerdote. Sin embargo, en ese tiempo no tenía elementos para una toma de posición “feminista”, ni siquiera inquietudes. Pasó mucho tiempo hasta que entendí la vida de otra manera. He tenido y tengo amigos sacerdotes a los que valoro profundamente, con quienes he compartido y comparto. Algunos también sueñan una iglesia distinta con relación al tema de género, otros están cómodos así como está la iglesia. También me he encontrado con algunos que por el hecho de ser sacerdotes u obispos pretenden que nos sometamos, que no admiten cuestionamientos y que se sienten “amenazados” porque no sólo estamos en igualdad de condiciones a nivel profesional, sino que en algunos casos nuestro nivel es superior. Recuerdo una entrevista con un Nuncio en una situación de conflicto. Pretendía que ante sus preguntas contestáramos simplemente sí o no. Y como insistíamos en explicar la situación, se acaloró tanto que se puso de pie, dio un puñetazo en la mesa y dijo muy molesto: Hermanas, ustedes no están en Beijing. Justo en ese tiempo se celebraba la Conferencia de Beijing.
También recuerdo momentos difíciles siendo yo presidenta de la Federación de Escuelas Católicas y posteriormente de la Conferencia de Religiosos/as de mi país. Ser mujer en uno de estos puestos es incómodo, te “ningunean”, estás en un encuentro con la Conferencia Episcopal, en diálogo, y lo que se está dando es yuxtaposición de conversaciones, y si se da el caso que el vicepresidente es varón, entonces ya lo sabes, en la conversación se dirigirán a él especialmente. Incluso en la correspondencia, he visto que esto pasaba en alguna ocasión, y quise creer que era equivocación. Y también es importante resaltar cuál puede ser nuestra reacción, a mí alguna persona, queriendo “ayudarme”, me ha dicho: “es que tienen que ser más humildes, más prudentes y también tienen que cuidar la fidelidad a la iglesia”.
Con relación a la ordenación sacerdotal, está claro que teológicamente no hay razones para que no sea posible, si bien se argumenta que las razones están en la tradición. Yo a nivel personal no tengo interés en el sacerdocio, me gusta ser “laos”. Pero por qué tanto interés en no facilitar algo que en definitiva sería un bien para la iglesia en tantos lugares donde estamos las mujeres y donde no hay sacerdotes. Digo bien para la Iglesia y no para el anuncio de la Buena Nueva, porque estoy segura que en esos sitios donde no hay celebración eucarística porque no hay sacerdote, hay anuncio de la Buena Nueva y vivencia de la Eucaristía, pan partido y entregado por la vida de la humanidad. Yo sueño con una iglesia en la que el DISCIPULADO DE IGUALES sea posible.
La frase: “los derechos humanos se convierten en derechos hasta que los ejercitamos”, me hace pensar en tantas personas que hoy en el mundo no pueden vivir los derechos que confesamos en la carta universal de derechos humanos. Hombres y mujeres pobres, niños y niñas, jóvenes… una gran parte de la humanidad. Los derechos están escritos pero no son reales, lo grita la carne de nuestros hermanos y hermanas. Y lo mismo pasa con los “derechos de las mujeres”, están escritos pero aún persiste la desigualdad, la inequidad, la discriminación, el abuso, la violencia… Y sin embargo, están escritos. Tristemente, en nuestra iglesia, todavía no están escritos o por lo menos faltan muchos pasos que dar.
Giselle

1.24.2009

El texto pertenece a la cartilla n. 15 Por manos de mujer y el articlo fue Conflictos en Corinto: las mujeres en la iglesia primitiva.d Irene Foulkes

En el texto se hace un análisis de cual fue la participación de la mujer en el culto, se observa como esta participación prohibida además lleva a conflictos que se prolongan y en los cuales aspectos como el arreglo del pelo toman parte importante de esta situación. También se define como la mujer tienen igual valor en cuanto a las relaciones sexuales, y como puede haber una negación hacia el matrimonio en aras de una vocación propia.

¿Cómo relacionas el artículo con la temática de género?

Se observa como se da una situación de Poco poder para disponer de su propia vida y poca oportunidad para influir en la vida de otros o de la colectividad y como a partir de su vinculación con la iglesia estas situaciones se van transformando en pro de unas relaciones más equitativas y de mayor propiedad por parte de la mujer en las intervenciones y relaciones que establece.

Este artículo con la temática de género nutre muchos aspectos: como la presencia y participación de las mujeres en condiciones que iban surgiendo en pro de una igualdad , como la iglesia es ese espacio propicio para que la mujer reconozca en si y en ella los otros y las otras esos dones que Dios nos da.


¿En qué medida el artículo apunta a una reflexión sobre relaciones de género donde prevalezca la equidad?

Aparecen varios aspectos que lo llevan a reflexionar a una en torno de esto es el caso de:

1. El generar conflicto, el hecho de un acceso desigual a los bienes no materiales valorados por el grupo, el ingreso a la iglesia y ejercer su liderazgo.
2. la mujer Asume el papel protagónico, ejerce su liderazgo, demuestra esa capacidad de dirigir, de enseñar, orientar y orar en la y con la congregación.
3. En 1 Co. 7 se enfatiza la reciprocidad e igualdad de mujeres y hombres dentro del matrimonio, y sus opciones idénticas frente a la soltería. Sin embargo hay una manera de interpretar este lenguaje igualitario y el impacto que tuvo en la vida de las mujeres.
4. Afirmaron su derecho a la auto-determinación religiosa, apoyadas por su nueva comunidad.
5. El texto nos muestra como en la comunidad cristiana en Corinto las mujeres lograron potenciarse en dos aspectos importantes en su vida: su protagonismo en el culto y su auto-definición frente al matrimonio.


¿Hasta qué punto el artículo invita a pensar las relaciones de género junto con otras relaciones: raza, clase…?

1. En este aspecto me llamó la atención desde las relaciones de gènero también la relación nominal nombrarnos con El termino “mujeres” en plural porque no existe como lo dice en el texto la “ mujer” ni en la antigüedad ni ahora , sino una colectividad heterogénea de personas de sexo femenino con características particulares que abarcan no solo la edad y estado civil sino también su ubicación socio económica , su etnia , religión, carisma personal.
2. Las relaciones de género con relación al estatus legal: de esclava, liberta o nacida libre. “Las mujeres muy pobres –libres o libertas –luchaban por sobrevivir en un mundo de hombres, el hecho de ser prostitutas, cortesanas o esposas legitimas también.
Me impacto frente a estas relaciones el lugar que se le daba a la mujer de objeto sin valor ni importancia dentro del grupo familiar: “La mayoría de las familias criaba a sus hijos varones, dejando abandonadas en el campo a las niñas recién nacidas por la disparidad entre el número de hombres y mujeres libres, Las que se recogían se clasificaban en esclavas y se destinaban a la prostitución.”


Destacar un elemento nuevo (metodológico o de contenido) que te llamó la atención en la lectura del texto y que significa un aporte en la lectura de otros textos de la Biblia.

Me llamó mucho la atención el hecho de reconocer el lugar que ocupa la mujer en este texto de Corintios donde a partir de sus intervenciones, el lanzar preguntas, y el disponer del espacio del culto para orar y profetizar, y como según las normas sociales de la época las mujeres no podían hacer nada de esto, sin embargo el espacio de la Iglesia Cristiana se había ido generando para que aquellas sintiéndose llenas y capaces de hacerlo lo hicieran. Desafortunadamente todas las mujeres no estaban capacitadas para este rol, muchas eran simples asistentes, y si su conducta estorbaba en el culto debían callarse, aquí me lleva a pensar como no todas estaban en igual condiciones y como pensar y ayudar a aquellas qe aun hoy en dia son invisibles en los espacios que aunque son propicios para desplegar lo que somos y hacemos señalan y juzgan nuestras limitaciones.

¿Qué ha sido más significativo para ti en tu proceso de acercamiento e interpretación de este texto?

1. Los términos lucha y conflicto expresados especialmente en el deseo de las mujeres por tener su espacio en la iglesia como estos términos pueden tener una significación diferente si analizamos como son generadores de oportunidades, aceptación y reconocimiento.

2. La iglesia es un espacio donde la mujer puede adquirir otros roles diferentes a los que socialmente están acostumbradas actúan como protagonistas en vez de ser objetos de debate.

3. Y finalmente como dejar de ser objeto sexual a sujeto matrimonial, se reivindica la legitimidad de las relaciones sexuales de la pareja, la mujer se define como socia de igual nivel en un matrimonio o con relaciones recíprocas entre los cónyuges, de entrega y derechos iguales, en la comunidad cristiana se empieza a formar un nuevo concepto de mujer casada.

Ingrid

1.22.2009

JESÚS Y LA SAMARITANA

SEMANA DEL 19 AL 25 DE ENERO, 09

LECTURA DE UNO DE LOS ARTÍCULOS DE LA REVISTA RIBLA No 15:
JESÚS Y LA SAMARITANA DE LUCÍA WEILER


LA PROPUESTA DE GÉNERO NOS PLANTEA LAS DESIGUALDADES EXISTENTES EN LOS ROLES DE HOMBRES Y MUJERES, SEGÚN SU CULTURA, RAZA, CLASE, FAMILIA, RELIGIÓN Y OTRAS CATEGORÍAS SOCIALES.

EN ESTE PASAJE ( JN. 4, 1 AL 42 ), JESÚS TOMA LA INICIATIVA DE DIRIGIRSE EN PÚBLICO A UNA MUJER DOBLEMENTE MARGINADA: POR SER MUJER Y SAMARITANA ( GENTE IMPURA Y DESPRECIABLE PARA LOS JUDÍOS ). ROMPE ASÍ, LAS TRADICIONES DE SU CULTURA Y RELIGIÓN, QUE NO SE LO PERMITÍAN, ACTUANDO CON EQUIDAD DE GÉNERO. AMBOS ENTRAN EN RELACIÓN.

LA LECTURA DEL TEXTO ILUMINA DOS CONFLICTOS QUE SE DAN EN LA REALIDAD ECLESIAL: LA PRESENCIA DE LA MUJER EN LA IGLESIA Y LA EVANGELIZACIÓN DE LAS CULTURAS OPRIMIDAS.

ME IMPRESIONA EL ENCUENTRO DE JESÚS CON LA MUJER SAMARITANA POR LA SENCILLEZ CON QUE SE DIRIGE A ELLA, MOSTRÁNDOSE NECESITADO '' DAME DE BEBER'' ( JN,4,7 ). ESTO DESCOLOCA A LA MUJER QUE INTERROGA A JESÚS, ENTRANDO EN DIÁLOGO Y DEBATE TEOLÓGICO CON ÉL, DANDO LUGAR A QUE JESÚS TOQUE SU VIDA, CONVIRTIÉNDOSE EN EVANGELIZADORA DE SU MISMO PUEBL

Iniciando caminos en la relectura bíblica

1. Toda lectura de la Biblia es una relectura.

“Cuando se interroga a la Biblia desde una nueva perspectiva, ella revela cosas nuevas que amplían o corrigen interpretaciones pasadas que respondían a intereses parciales o condiciones distintas”

Me parece una afirmación muy liberadora, especialmente para ambientes donde se ha puesto gran énfasis en la “interpretación oficial de la Biblia” por personas especializadas y autorizadas para ello y se mira con sospecha otras interpretaciones desde perspectivas diferentes.

Es necesario cambiar el imaginario de percibir la Biblia solamente como una revelación divina, Palabra de Dios y por lo tanto incuestionable.

Una clave que nos puede ayudar a hacer relectura es separar la forma del contenido. La forma es histórica, está condicionada por una sociedad patriarcal y por un lenguaje androcéntrico. El contenido, es la revelación de Dios, que necesita ser desentrañada de la forma y adaptada a las distintas circunstancias históricas. Es fundamental entender que las formulaciones son históricas, pues fueron hechas en un contexto concreto y desde una visión selectiva de la realidad.


2. “Las sociedades bíblicas eran claramente patriarcales y por eso, androcéntricas”.

No sólo las sociedades bíblicas son patriarcales, también lo es la sociedad actual. Me impresiona la fuerza que tiene el sistema patriarcal para mantenerse vigente a lo largo de tantos siglos y en las diferentes culturas. Y aunque el movimiento femenino y la conciencia de género se va lentamente propagando, creo que es necesario que pase mucho tiempo para que la conciencia de la desigualdad que trae consigo se generalice y lleve a muchos hombres y mujeres a optar por un sistema de relaciones donde prevalezca la equidad. Esta toma de conciencia despierta en mí una mayor urgencia de compromiso por esta opción.


3. RECONSTRUIR LA PRESENCIA DE LAS MUJERES EN LOS TEXTOS.

Para lograr esto tenemos que investigar sobre la situación socio-económica, política y religiosa de las mujeres en la época del texto, y también el concepto que los hombres tenían de ellas.

Este paso de relectura bíblica me llamó la atención por el esfuerzo en el estudio y la investigación que supone el profundizar en una perspectiva histórica del contexto en que fue escrito el texto. No sólo es necesario acudir a la hermenéutica, a la exégesis sino también a la historia para conocer datos concretos de la cultura bíblica.

4. “Estamos comprometidas con el mensaje bíblico de liberación y vida plena para todas las personas y todo el pueblo. Queremos ayudar a que su mensaje contribuya no al sometimiento de la mujer sino a su promoción”

Este propósito bellamente expresado hizo “click” con mi propio deseo. Cuando en medio de muchas cosas, priorizo darle tiempo a la lectura y reflexión sobre temas de perspectiva de género, la liberación, la vida plena, las relaciones de igualdad entre personas concretas es el compromiso que me motiva.

1.21.2009

COMENTARIO A REVISTA RIBLA: BOOZ... Hacia una masculinidad de donación

Semana del 19 al 24 de enero

Mi comentario de hoy se basa en el artículo “Booz… Hacia una masculinidad de donación” de Lucio Rubén Blanco Arellano (RIBLA No. 56, Reimaginando las masculinidades).

El artículo, como toda la revista, es muy interesante. El autor plantea, desde su condición de “hombre”, qué pueden aportar los varones a la construcción de un imaginario más humano y humanizante de la masculinidad.

Se acerca al libro de Rut desde unas claves de interpretación sencillas y claras:
• La teoría de género
• El cuerpo como el único medio que tenemos para entrar en contacto con la realidad. Y desde esta clave hace hincapié en la visión de masculinidad que percibe en los varones del libro.
• La cotidianidad que permite ver la masculinidad desde la experiencia diaria.
• Los símbolos que ayudan a percibir los sentidos ocultos de la vida y de los textos.

Y, como telón de fondo, la convicción de que la interpretación de la Biblia ha de servir a las/os pobres, si no, está errada y hay que buscar otra interpretación, porque Jesús vino a anunciar la Buena Noticia a las/os pobres...

El autor hace hincapié en la diferencia de “valoración” que se da entre Rut y Booz a través de las traducciones de los textos que se han realizado. En Rut 2,1 se dice que Booz es un hombre de GRAN VALOR (hayil en hebreo). Este título se le da a los jueces, quienes deben dar solución a las causas que les son presentadas. (Jc 6, 12) En Rut 3, 11 se emplea el mismo término para Rut. Esto significa que los roles de ambos son iguales: liberadores, jueces esperados por el pueblo. Sin embargo, “hayil” con relación a Rut se traduce como “una mujer VIRTUOSA”. De la traducción, por lo tanto, no se desprende que ella sea jueza ni liberadora.

Con relación a Noemí, el autor destaca que esta mujer pareciera no tener voz. En la casa patriarcal, las mujeres no tenían voz, el pater familias gozaba de autoridad absoluta sobre hijos y mujer/es. Es su marido Elimelek quien decide que la familia fuera a Moab y ella lo sigue. En Moab muere el marido y también los dos hijos varones. Es entonces cuando ella toma la palabra, asume la responsabilidad de su propia vida y la de sus nueras y deja brotar su capacidad de liderazgo. Nosotras podríamos decir que cuando en nosotras muere el sometimiento, la rutinaria falta de conciencia crítica, la no usada capacidad de tomar decisiones… entonces renace la voz, tomamos la palabra y nos ponemos de pie. Y en esta puesta en pie se van poniendo también de pie otras y otros a quienes el sistema había hecho invisibles, insignificantes, sobrantes.

El autor hace un planteamiento crítico del rescate de Rut por parte de Booz. Si bien es cierto que ayuda a Rut, no lo hizo desde el momento en que Noemí regresó a Belén. ¿A qué se debe este retraso? ¿Por qué tiene que esperar hasta que Rut toma la iniciativa? El autor insiste en el puesto que Booz tiene en la esfera pública y su necesidad de aprobación social de otros varones ya que el “honor” es valor fundamental de la cultura mediterránea. Es un hombre poderoso, con prestigio y bueno, sin embargo está “atrapado” en la sociedad patriarcal y en su manera de comprender la masculinidad. Sin embargo, mirar a Rut, considerar su actitud, su capacidad de dejar atrás todo: casa familiar, pueblo, amigos/as, costumbres… pudo haber cuestionado su manera de actuar inicial.

Otro cuestionamiento consiste en la posibilidad de una dificultad de relación con las mujeres dado que Booz era bastante mayor y había ya pasado la edad normal en que un hombre se casaba. El autor cita a Mercedes Navarro que califica esta actitud ante las mujeres como “inseguridad”, también a otro autor, Mieke Bal, que va más allá y la califica de “impotencia sexual”.

Booz se casa con Rut y esta acción de rescate también aumenta su prestigio social. También cambia la situación social de Rut. El fruto de la unión de Rut y Booz es Obed, al nacer es tomado en brazos por Noemí, él garantizará la continuidad de Elimelek. También cambia la situación de Noemí, ya no será más Mará (amargura). El autor entonces cuestiona más allá de esta nueva situación afirmando que la masculinidad de Booz ha cambiado poco si su actitud con relación a otras Ruts y Noemís no ha cambiado, en otras palabras, si se sigue manteniendo la estructura de dominación patriarcal.

Lo más novedoso del artículo, a mi juicio, es la propuesta de una nueva masculinidad para Booz y evidentemente para los varones de nuestro mundo:

En 4, 12 la gente y los ancianos le desean a Booz que su casa sea como la de Peres, el hijo de Tamar y Judá. El autor reconoce en Tamar a una quebrantadora de las reglas sociales para lograr la justicia. Y lee en este versículo una invitación para Booz a ser también un quebrantador para la vida del pueblo.

Son las mujeres quienes dan nombre al hijo de Booz y Rut: Obed que significa siervo. El autor lee en este gesto la llamada a Booz de convertirse en siervo de todo el pueblo pobre y sufriente. En este sentido, Obed no tendrá que ser como su padre, sino al revés, Booz tendrá que convertirse en Obed.

Y finalmente la invitación a una nueva masculinidad supone que Booz y Rut, en igualdad de condiciones, como JUECES, tienen que ayudar al pueblo a refundar Israel en igualdad, reciprocidad, solidaridad, fraternidad, acceso a la tierra y la justicia para todos/as, lo cual supone deshacerse de una masculinidad de dominación, del macho dominador y opresor que la cultura le ha impuesto.

Me quedo, una vez más, con la convicción de que los mecanismos de esta sociedad patriarcal hieren en su dignidad más profunda a mujeres y hombres. Y con la invitación a que juntas/os recreemos, hagamos posible el sueño de Dios porque la creación entera sigue gimiendo con dolores de parto.

Giselle

1.20.2009

"AH!... AMOR EN DELICIAS." REVISTA RIBLA

SEMANA DEL 19 al 25 de enero (Teresa del Pilar)

Lectura de un artículo de una de las Revistas RIBLA

“Ah!... Amor en delicias.”, de Nancy Cardoso Pereira, en Ribla, Nº 15, págs. 59-74


1. El artículo está escrito desde una perspectiva de género al plantear que El Cantar de los Cantares no hace un discurso asexuado sobre la persona humana. Al contrario, la palabra es sexuada en la afirmación del cuerpo de mujer y del cuerpo del varón. Los personajes son sus cuerpos. En la relación de amor y en la relación contraria, los cuerpos se posicionan. Tanto la mujer como el hombre presentan características corporales concretas y diferentes entre si. La mediación privilegiada que utilizan los amantes constituyen sus cuerpos donde los sentidos tienen un papel preponderante. La expresión del discurso amoroso (a veces poético) se da a partir de los sentidos donde la experiencia puede ser vista, gustada, oída, tocada…

2. El artículo apunta a una reflexión sobre relaciones de género donde prevalezca la equidad por cuanto que se explicita la importancia del cuerpo (del varón y de la mujer) en las relaciones interpersonales. Es impensable la equidad cuando respecto al cuerpo de la mujer se da una carga negativa. Por ejemplo, en el tema del pelo. Habitualmente se le ha exigido a la mujer taparlo o cortarlo y, sin embargo, miremos la praxis de Jesús. Cuando se acerca la mujer a ungirle los pies, ella no sólo rompe las leyes del banquete del fariseo, sino que expresa su ser de mujer como un gesto de alabanza y amor a Jesús, le seca los pies con su pelo. Otro ejemplo es la menstruación, que en el Antiguo testamento está conectada con lo que los antiguos llamaban impureza y la impureza se contagia... como las enfermedades.

Sin embargo, en el Cantar de los Cantares el lugar que ocupan los cuerpos es no sólo relevante y dignificador, sino que ellos aparecen como fuente de placer y espacio de alternativa y creatividad frente a la política estrecha y opresora de los líderes sacerdotales.

3. El texto invita a pensar las relaciones de género junto con la de clase social, justamente porque el cuerpo representa la memoria liberadora de los pobres, memoria curtida en el cuerpo esperanzado y luchador de hombres y mujeres concretos. Y es precisamente en los textos bíblicos donde las relaciones aparecen también alimentándose de experiencias y conversaciones en cuestiones amorosas.

Ahora bien, es sabido que las estructuras políticas, económicas, religiosas y culturales utilizan estratégicamente el amor y le designan espacios que intentan controlar, muchas veces, para sus propios beneficios, llámese: poder, placer y plata. De este modo, el potencial del amor es utilizado a través de los cuerpos más vulnerables, sobre todo, los de la mujer pobre. En América Latina el cuerpo de la mujer pobre y joven es explotado y prostituido por varones proxenetas, que eufemísticamente se hacen llamar empresarios.

4. Podemos afirmar que el libro del Cantar de los Cantares nos presenta un nuevo elemento metodológico y de contenido. En otras palabras, la alternativa que nos muestra está no solamente en el contenido, sino en la forma. Se da un tono joven, apasionado, sensual, atrevido y crítico. Huyendo del esquema legalista-legislativo, el libro reúne poemas de amor, poemas eróticos que no necesitan de explicación o explicitación de sentido.

De este modo, niega el discurso legalista sin yuxtaponer otro discurso. Propone un lenguaje diferente, el hablar del cuerpo. Así, se da una ruptura con el parámetro teológico tradicional que busca liberar las formas de este discurso; es más, la liberación de la teología misma. No obstante, en nuestros días persiste la necesidad generalizada de que la espiritualidad del Cantar de los Cantares sea redescubierta y valorizada como dinámica efectivamente liberadora y crítica.

“Redescubrir las zonas erógenas del texto y de la memoria viene siendo una de las exigencias de los movimientos de liberación que no se contentan con los cambios superficiales y parciales, sino que quieren más, la liberación también en lo cotidiano y sus relaciones” (Cardozo Pereira, Nancy, Pág. 66).

5. Lo más significativo para mí en el proceso de acercamiento e interpretación de este texto ha sido constatar cómo en la hermenéutica bíblica los amores, el cuerpo, los sentidos y la sexualidad desaparecen. La tradición cristiana ha sido instrumento eficiente de represión de la sexualidad y de las expresiones de amor.

“Las reuniones de comunidad, los análisis de coyuntura, las conversaciones sobre la lucha del día a día, las reflexiones pastorales y teológicas, la vida litúrgica desconocen y evitan las palabras, las motivaciones de amor y sexualidad, tratándolas como asunto particular y privado que debe ser vivido en el ámbito cerrado de la familia, sea ella como sea.” (Cardozo Pereira, Nancy, Pág. 60).

En el tema de la sexualidad, del cuerpo, del amor, de las relaciones interpersonales, en definitiva, de la vida y de la realidad la función de los sentidos desempeña un papel fundamental que no ha sido descubierto. Es un gran desafío reconocer y potenciar estas variables, pues podrían constituirse en una gran ayuda para la hermenéutica bíblica situada.

1.18.2009

Comentario a Relaciones de género en las Iglesias 1

Semana del 11 al 18 de enero

En este primer acercamiento a lo que nos propone el libro “Relaciones de Género en la Iglesia: Educar para cambiar”, resalto algunas cosas que me parecen especialmente significativas:

El acercamiento al tema se hace desde una perspectiva ecuménica, a la vez que es una riqueza supone un cuestionamiento para nosotras/os como iglesia católica con relación a la equitativa participación de hombres y mujeres dentro de la iglesia.

A nivel social se reconoce que ya no es posible concebir el desarrollo sin incluir la problemática de la inequidad de género. A nivel eclesial jerárquico se reconoce igualmente esta necesidad cuando se refiere al mundo extraeclesial, sin embargo no se hace el mismo planteamiento con relación a lo intraeclesial.

Me gusta que se exprese que las mujeres de iglesia estamos decididas a promover el cambio, sin embargo, no tengo la certeza de que la mayor parte de las mujeres de iglesia estemos tan empeñadas en lograr esta transformación. Por eso, considero muy importante que nos ayudemos mutuamente a caminar en este sentido.

Si queremos ir dando pasos en esta transformación tenemos que educarnos y educar intencionalmente desde esta perspectiva, revisar los roles de hombres y mujeres en la iglesia, replantear las políticas de participación, gestión y toma de decisiones y empoderarnos – del inglés empower- para trabajar por el cambio. Sin embargo, también es importante una clara conciencia de esta necesidad en quienes están en los ámbitos de poder organizativo, y eso en nuestra realidad eclesial no es tan fácil conseguirlo.

Las relaciones de género en nuestro mundo ponen de manifiesto el desequilibro social, económico, cultural y político entre mujeres y hombres, por sus roles en la familia y la sociedad. Lo podemos ver en un sin número de ejemplos: inequidad de salarios en igualdad de condiciones profesionales o laborales, desniveles educativos, desvalorización de los roles domésticos y otros… y a nivel eclesial hay un claro desequilibrio en las responsabilidades, toma de decisiones, ministerios… Esta falta de equidad hiere la dignidad de mujeres y hombres. Sin embargo, la equidad es posible porque la inequidad fue construida y todo lo que ha sido creado humanamente puede ser DECONSTRUIDO y RECONSTRUIDO. Reconstruir la dignidad de mujeres y hombres contribuye al sueño de una humanidad más parecida al proyecto de Dios. En este sentido, la propuesta de género se convierte en un aporte a la convivencia humana y al proyecto evangélico.

Giselle

1.14.2009

"De los ojos de Agar a los ojos de Dios"

Artículo de una de la Revista RIBLA: “De los ojos de Agar a los ojos de Dios” Gn. 16,1-16
de Mercedes Brancher pags 11-27


• ¿Cómo relacionas el artículo con la temática de género?

El artículo es una interpretación del texto de Gn 16,1-16, destaca las relaciones sociales de poder entre distintos sujetos sociales y que se desarrollan sobre el eje de las relaciones entre etnia, raza, clase o sexo. Según Brancher el género es relacional y debe captar la trama de las relaciones.

• ¿En qué medida el artículo apunta a una reflexión sobre relaciones de género donde prevalezca la equidad?
Aunque el artículo presenta diversas interpretaciones del mismo, la interpretación donde prevalece la equidad consiste en ver este texto como la historia de rebeldía y emancipación de una esclava: Agar, quien ante el conflicto con Sara, su patrona, decide huir e irse al desierto.

Y Yavé se pone no del lado de Sara, prolongación del brazo patriarcal, quien maltrata a Agar. Sino que envía un mensajero que le anuncia que su aflicción ha sido escuchada, que Yavé se solidariza con ella y le anuncia la bendición de una descendencia numerosa.

• ¿Hasta qué punto el artículo invita a pensar las relaciones de género junto con otras relaciones: raza, clase…?

En este texto no sólo se ve la trama de relación de dos mujeres, ambas influidas por una cultura patriarcal que les impone la procreación como tarea básica para ser valoradas. Sara, es una mujer rica, patrona, e israelita, pero además es estéril. Agar por otro lado es una mujer pobre, esclava y extranjera.

Ambas sin embargo tienen poder. Sara tiene el poder de una legislación que la defiende en su decisión de usar el útero de su esclava para dar hijos al patriarca, ya que ella es estéril. El poder de Agar está en la fertilidad de su útero y capacidad de parir. Es importante ver los espacios de poder distintos en la estructura social, y observar las relaciones de poder como algo implícito en las relaciones de género.

El texto habla de dos mujeres: Sara: esposa de Abraham, mujer estéril, patrona, israelita. Agar: esclava, extranjera: egipcia, y con su útero fértil.

• Destacar un elemento nuevo (metodológico o de contenido) que te llamó la atención en la lectura del texto y que significa un aporte en la lectura de otros textos de la Biblia.

Interpretar no es sólo releer lo que está escrito. Al interpretar es importante evaluar la trayectoria social recorrida por el texto. La exégesis no sólo relee los sentidos, igualmente escudriña la historia.

Este artículo describe las distintas etapas literarias en que se desarrolló el texto: la narrativa básica donde se dio la primera redacción del episodio, se desarrolló en torno al siglo X, posteriormente hubo unos añadidos durante el tiempo de la invasión de los asirios y finalmente otros añadidos pertenecían a la época del post-exilio. Cada añadido en un época concreta nos da luz para entender el énfasis que se daba a lugares, costumbres sociales, leyes etc.

Me pareció interesante esta contextualización histórica del texto no sólo en un momento determinado sino con los distintos cambios o añadiduras que sufrió el texto. Esto nos da una perspectiva más amplia para entenderlo e interpretarlo con mayor precisión. Texto, contexto y evolución histórica no se deben separar en ninguna exégesis si queremos tener una mirada amplia de interpretación.

• ¿Qué ha sido más significativo para ti en tu proceso de acercamiento e interpretación de este texto?

Para mí fue significativo conocer datos concretos sobre los distintos añadidos que se hicieron al texto original. La base de Gn 16 es una memoria popular que tiene su origen en las mujeres esclavas y que se trasmitió en forma oral. El texto nos muestra un espacio importante: la fuente y el pozo como un posible lugar donde las esclavas celebraran su experiencia de fe. Este espacio fue fundamental para que las esclavas pudieran guardar sus memorias de resistencia y lucha por la dignidad y emancipación. Junto a este espacio ocurrían muchas reuniones, celebraciones y fiestas.

Una vez más compruebo que tener una perspectiva histórica de un texto amplia nuestra forma de entenderlo e interpretarlo.

También fue importante para mi entrar en contacto con las distintas corrientes de interpretación de este texto, lo que me dio la idea de que hay siempre distintas perspectivas para profundizar en un texto.

1.12.2009

Primeros pasos en teoría de género.

- Sexo: Diferencia biológica que existe entre un hombre y una mujer.
- Género: como concepto, se refiere a las distintas características construidas social y culturalmente para hombres y mujeres. Este concepto de está íntimamente ligado a los conceptos de raza, clase, etnia, cultura, religión y otras categorías sociales que identifican a los seres humanos. Los roles de género son los papeles y las funciones asignadas o que se adscriben a hombres y mujeres.

Para diferenciar el sexo de una persona simplemente miraba la forma de su cuerpo o algunos caracteres primarios:
Si tiene senos y caderas anchas, es mujer; si tiene espalda ancha, barba o bigote, es hombre.
Sin embargo hay algunas razas donde los caracteres primarios no son tan visiblemente definidos, por ejemplo muchos hombres orientales son de contextura delgada, poco fornidos, no presentan barba o bigote, mientras que el cuerpo de las mujeres no tiene formas tan definidas o voluptuosas. Y a primera vista te puedes preguntar es hombre o mujer? En ocasiones tampoco el rostro o el corte de cabello ayuda a ver claramente la diferencia.


Tengo ejemplos de voces de personas adultas a mi alrededor que escuché desde mi infancia…Por ejemplo:

-Las niñas se sientan bien y no son bruscas
-Las mujeres no fuman en la calle.
-Una mujer honrada no llega al hogar a altas horas de la noche
-Aunque tu esposo te sea infiel, tú debes permanecerle fiel.
-A los bebés no se les pone ropa rosada, eso es para las niñas, a ellos se les viste de azul.

Pero no sólo voces, sino también actitudes y costumbres que observé en el hogar, en la escuela o en la Iglesia

-Ofrecer mejor atención al padre que llega cansando del trabajo
-Diferencia marcada en los oficios domésticos que se asignan a hombres y mujeres.
-Juegos propios para niñas y niños
-Las mujeres limpian y decoran la Iglesia, los hombres leen en las celebraciones y deciden los asuntos varios.
-Los hombres tienen más fuerza y pueden cargar cosas pesadas, las niñas son más débiles.
-La mujer tiene que ser más paciente y escuchar pues el hombre es más impulsivo y dominante… y muchos ejemplos más.
-Las mujeres conducen peor que los hombres.

Patriarcado es un sistema de organización social en el que los puestos clave de poder (político, económico, religioso y militar) se encuentran, exclusiva o mayoritariamente, en manos de varones.

En la lectura “Primeros pasos sobre la teoría de género” al leer las definiciones de patriarcado me impresionó la expresión: “Actualmente, el patriarcado es el único tipo de sociedad que existe en el mundo conocido”. El patriarcado como fuerza o poder que determina la postura desventajosa de la mujer es universal, se da en toda clase de sociedades, lugares geográficos, estratos sociales y en todos los tiempos.

Me surge el interrogante de qué podemos hacer para que la toma de conciencia de esta “desigualdad injusta” se haga también universal? Considero que la toma de conciencia y la indignación ante esta desigualdad es el punto de partida para la lucha por una equidad de género.

Mi reflexión en red - Documentos teresianos

MI REFLEXIÓN EN RED

Hola! Aqui estoy tratando de recuperarme en lecturas atrazadas, espero ponerme al día pronto, suerte!

DOCUMENTOS TERESIANOS
Ofrecemos nuestra aportación como mujeres. (Const Art. 2)
Es una expresión que parece obvia para nosotras religiosas teresianas y sin embargo, es factible que nos hagamos más conscientes de nuestro ser de religiosas que de nuestro ser de mujeres, que está a la base de nuestra identidad. En algunas sociedades el ser religiosa es un rol que aún se aprecia, pero nuestro ser de mujer no es fácilmente reconocido y apreciado en muchos lugares del mundo.

Asumimos el reto de profundizar en la perspectiva de género. (Const Art. 30)
Me pregunto si este reto está presente en el imaginario de la mayoría de educadores que tratamos de hacer vida la mística de la educación teresiana. Deseo que la participación en este foro y toda nuestra reflexión compartida sean un medio para hacer realidad esta afirmación.

Recuperar la historia de género es recuperar la identidad humana en toda su diversidad.
Esta afirmación del Proyecto Formativo me ayudó a tomar consciencia de que el recuperar la historia de género no es algo que beneficie solamente a las mujeres sino que beneficia a toda la humanidad, compuesta por hombres y mujeres, personas únicas e irrepetibles.

COMENTARIO A UN ARTÍCULO DE RIBLA Prostitutas-Madres-Mujeres

Semana del 5 al 11 de enero de 2009

Mi comentario se basa en el artículo “Prostitutas-Madres-Mujeres” subtitulado: Obsesiones y profecías en 1 Reyes 3, 16 – 28 de Nancy Cardoso Pereira. (RIBLA No. 25, Pero nosotras decimos).

Todas/os conocemos el texto, cuando éramos pequeñas/os lo leíamos y aprendimos lo que era una decisión salomónica, también aprendimos a poner a las personas en situación límite para que “la verdad” salga a flote, a veces a costa de la dignidad de las personas, dicho de otra manera, la verdad absolutizada por encima de la posibilidad de luz en cada persona, por encima del amor.

En el texto hay dos mujeres y dos niños que se convierten en objeto, cuerpos prostituidos dice la autora, para que el gran rey ejerza su sabiduría. La figura de las mujeres es un estereotipo: prostitutas, madres, incapacitadas para tomar una decisión por ellas mismas –ha de ser el hombre/rey quien la tome-, no solidarias entre ellas… El hombre/rey es bueno, es poderoso, es sabio, toma decisiones justas… son las asimetrías de género que hacen invisibles y reprimen posibilidades de crecimiento en las mujeres y también en los hombres.

La autora sitúa el texto en el contexto más amplio que presenta el Primer Libro de los Reyes. La violencia, confusión, conflicto y lucha por el poder que preceden la coronación de Salomón termina con la exaltación del Rey como sabio, constructor del templo y promotor de la expansión del Reino. En medio de estas dos situaciones se encuentra nuestro texto, puesto allí como un anuncio de lo que será el reinado de este hombre en medio de un pueblo que no parece capaz de autodeterminarse: “todo Israel se enteró de la sentencia del rey, viendo que había en él una sabiduría divina para administrar justicia” (3, 28)

A lo largo del artículo se habla de las mujeres que rodean a Salomón: ama a muchas pero a ninguna en particular, setecientas esposas y trescientas concubinas (11, 1. 3), todo un harén. En el reinado de Salomón, dice la autora, las mujeres pierden protagonismo y pasan a ser posesión. El sistema sociopolítico de la monarquía ha destrozado la economía tribal en la que la presencia de las mujeres era fuerte y visible en forma de liderazgo militar, religioso y cultural.

El estereotipo de mujeres incapaces de un proceso de discernimiento de la verdad y de la sabiduría las convierte en necesitadas de jerarquía, de niveles superiores de gobierno que puedan decidir por ellas. Esta es una clave de lectura importante para otros textos de la Biblia. En el caso del texto que nos ocupa, por un lado el poder de una clase económicamente más desarrollada (la monarquía) que otra (las mujeres y, en este caso, prostitutas) y también el poder del hombre sobre la mujer que tiene que ser dócil porque por naturaleza tiende al error y necesita la dirección de otros.

En la vida cotidiana y en el acercamiento a otros textos, evaluar este estereotipo no significa invertirlo creyendo que las mujeres son mejores que los hombres sino ayudarnos a luchar para afirmarnos en nuestra capacidad de discernimiento y decisión ética, preguntarnos sobre la circulación del poder y por las representaciones de género a nivel real y simbólico.

La autora habla de la necesidad de hacer estallar los estereotipos trabajando con la categoría de género: desconfiar de lo que se llama naturaleza femenina, lo propio de ser mujer, instinto materno, ser mujer de la vida, para intentar comprender las experiencias de ser madre, mujer, prostituta dentro de las relaciones sociales de poder y desde allí comprender este texto y otros textos bíblicos así como su influencia en nuestra manera de entender la vida.

Para adentrarnos en este estallido de estereotipos es importante ver a las mujeres delante del rey que dictará sentencia desde su papel de juez y preguntarnos cómo circula el poder, en caso de que circule. En nuestro mundo tenemos experiencia de que la justicia y el discernimiento de la verdad pueden variar dependiendo de quién tiene el poder.

Ellas tenían derecho a testigos y si no hubiese, el juez tenía la obligación de llevar el caso hasta Dios a través de juramentos. Sin embargo, el rey dicta sentencia sin tener en cuenta estos derechos, él se convierte en poseedor de la verdad y de la sabiduría. “Salomón no mira, no investiga, no evalúa. Usa una clave de interpretación que se basa en el estereotipo del instinto materno, del amor sacrificial de la madre”, dice la autora. Y su decisión, aunque sea una estrategia, atenta contra la vida del niño al que manda a dividir en dos. La mujer tiene que desistir de luchar por su hijo porque quiere que su hijo viva. La mujer desaparece cuando aparece la madre. El rey ha sido eficaz en el ejercicio de la justicia y en la negación del protagonismo de la mujer.

Los estereotipos refuerzan las relaciones asimétricas entre hombres y mujeres. También imposibilitan las relaciones de solidaridad entre mujeres cuando tenemos que luchar por la aprobación social de los papeles que nos han asignado. En este texto, pero también en la vida cotidiana, podemos ver los estereotipos de instinto materno para las mujeres y de objetividad de juicio de los hombres. Es fundamental que replanteemos, cuestionemos estos estereotipos y lo que ellos suponen para la vida y dignidad de mujeres y hombres.

Giselle

RELACIONES DE GÉNERO EN LAS IGLESIAS

SEMANA DEL 12 al 18 de enero (Teresa del Pilar)

Lectura de: Relaciones de género en las iglesias (1).

Ø Mis resonancias ante lo que he leído, pienso también en mi propia experiencia a nivel eclesial.

Este taller, en la sesión 1 y 2, lo realicé en dos Comunidades diferentes (adultos) del MTA del Colegio Teresiano de Asunción. Uno de los grupos lo acogió con mucho entusiasmo, las integrantes vibraban con el tema. En cambio, en el otro (todas mujeres también) una de ellas se sintió muy ofendida. Lo tomó como un atentado a lo que desde siempre “la Iglesia” ha venido pregonando. Tal es así que (cuento corto) acudió de un lugar a otro llevando su versión sobre lo conversado.

De todo lo que he visto y escuchado en esta experiencia (taller) deduje que necesitamos hacer consciencia, hacer consciencia y hacer consciencia. Y esto porque la gente con sensibilidad a la perspectiva de género tiene que encontrar una fundamentación sólida a sus búsquedas y, a la vez, sentirse monitoreada. Mientras, las demás, con actitudes reacias, porque poco a poco tendrán que ir ampliando su modo de situarse en el mundo actual para poder ser fiel a los signos de los tiempos. En este caso, a la emergencia de la mujer en la sociedad y en las iglesias.

Es necesario puntualizar que en el compartir de las dos comunidades del MTA hubo bastantes coincidencias en cuanto a la percepción de la mujer como objeto de marginación por parte de las diferentes instituciones, sobre todo por la eclesial. Dicha marginación se da no sólo en las instituciones, sino también a nivel organizacional, esto es, de estructura, sistema, cultura…

Por otro lado, este tema lo trabajé también con mis alumnas (y dos varones) del último año del Nivel Medio del Colegio Teresiano de Asunción. Al principio algunas mostraban resistencia, pues manifestaban que la Iglesia lo disponía así y, por tanto, aquello no se podía discutir. Es curioso cómo en este estrato medio-alto la gente (jóvenes y adultos) es más bien renuente al cambio, del tipo que fuera. Sin embargo, paradójicamente en su vida personal hay mucha contradicción, permisividad y laxitud. Es un fenómeno que invita ser pensado.

Mi experiencia personal a nivel eclesial (parroquia de un barrio popular) es bien dura, pues la postura de uno de los sacerdotes (los otros dos no siempre lo verbalizan, pero lo viven) es la siguiente: “El feminismo es cosa del diablo”. Creo que ante semejante afirmación todo tipo de comentario es superfluo. Sin lugar a dudas, tendremos que ir buscando, como comunidad, alternativas para ver cómo dar pasos hacia la sensibilización sobre el tema. Aquí hay que empezar prácticamente de cero, no hay nada hecho. Los que asisten a la parroquia son sumisos y sumisas, creen que lo que dice el sacerdote es algo sagrado e infalible. En cambio, los que no están de acuerdo (la mayoría de los jóvenes) con dicha postura se alejan de todo compromiso parroquial, reciben los sacramentos, como un trámite, y desaparecen.



1.11.2009

INICIANDO CAMINOS EN LA RELECTURA BÍBLICA

Cuando estamos deseando desde la Compañía que la "Palabra de Dios ilumine y sostenga nuestra mirada y nuestra actitud creyente ante la vida" (Desafío 1 del documento Capitular), es importante que nos hagamos conscientes desde dónde nos acercamos a ella, la escuchamos y la acogemos. La exégesis nos ha invitado a acercarnos al texto bíblico, conociendo la situación socio-económica, política, religiosa del momento; las circunstancias históricas que nos darían luz para captar mejor el mensaje. Hoy reconozco la trascendencia de hacer esto descolonizando nuestra mente de los valores patriarcales desde los que hemos hecho este estudio exegético.

Hemos de reconstruir la presencia de las mujeres en los textos y analizar su exclusión cuando acontece. Nos ayudará acercarnos a los textos preguntándoles:

- ¿Cuál era la situación socioeconómica, política, religiosa de las mujeres en ese momento?
- ¿Qué concepto tenían los hombres de ellas?
- ¿Aparece la mujer en el texto, cómo, por qué?, ¿qué hace?. ¿qué piensa de lo ocurrido, de lo expresado?
- Y si no aparece, ¿por qué será?

Seguro que, desde esa perspectiva, los textos pueden iluminar de forma distinta nuestra realidad y la realidad de las mujeres de nuestro mundo. Es necesario hacernos conscientes y formarnos para ello.

1.05.2009

comentario texto iniciando caminos en la relectura bíblica

· Es fundamental tener en cuenta los pasos que nos invitan a leer , interpretar y asumir el mensaje de la biblia con perspectiva de género, esto nos da elementos que nos ayudará a tener una postura e introyecciòn del mensaje de un modo diferente, el texto nos dice como al leer un pasaje bíblico es necesario el descolonizar la mente de los imaginarios patriarcales que poseemos , porque aunque los libros fueron escritos por hombres , Dios pensaba y piensa en todas y en todos, mujeres y hombres , sus hijas e hijos.
Reconstruir la presencia de las mujeres en los textos, hay que hacer visible aquello que ha sido invisibilizado, para lo cual es necesario estudiar y conocer el contexto donde se desarrolla el texto bíblico.
· Poner el texto y su contexto en dialogo con nuestro contexto , saber que nos quiere decir hoy , con las realidades que vivimos como lo podemos asumir , de igual manera conocer el contexto original en que se desarrollo el texto es muy importante para saber en qué circunstancias se desarrollaron los hechos.
· Cuando se le interroga a la biblia desde una nueva perspectiva, ella revela cosas nuevas que amplían o corrigen interpretaciones pasadas que correspondía a intereses parciales o condiciones distintas. Me llamó mucho la atención este enunciado donde pone en conocimiento a la lectora o lector como la lectura bíblica es un ejercicio que requiere ser asumido desde el enfoque o naturaleza que la lectora o el lector le quiera dar, invita desde el hecho de decir “interroga” a establecer un diálogo con el texto, no es letra muerta , es letra que contiene vida y se renueva en la medida que la acogemos y la hacemos parte de nuestra pauta de vida.
· Los autores bíblicos eran hombres y sus culturas patriarcales, por eso los textos reflejan una experiencia y una visión androcéntrica. la afirmación anterior hace un aporte al conocimiento y adopción de los textos, nos sitúan en reconocer que el lenguaje y los modos expresados traen consigo también una postura y forma de asumir la vida, la experiencia y el mensaje de un modo androcéntrico, diferente a lo que significa para la mujer, ser inspirada por Dios y su palabra, su experiencia y poder compartirlo con las otras y los otros.

ARTÍCULO DE LA REVISTA RIBLA

SEMANA DEL 5 al 11 de enero (Teresa del Pilar)

Ø Lectura de un artículo de una de las Revistas RIBLA

“Algunos elementos de la espiritualidad masculina vistos a través de la narración bíblica de Jacob”, de Hugo Cáceres Guinet, en Ribla, Nº 56, págs. 16- 26

El artículo está relacionado a la temática de género en cuanto que se plantea el reconocimiento de una espiritualidad propia del varón en la base de cualquier búsqueda de Dios, emprendida a través de las diversas espiritualidades reconocidas por la tradición de la Iglesia.

El artículo apunta a una reflexión sobre relaciones de género donde prevalezca la equidad en la medida que la espiritualidad del varón (delineado en la figura de Jacob) pasa por todo un recorrido que el autor identifica en un proceso de tres momentos que culmina con el doloroso reconocimiento de su humanidad. Es entonces cuando se abre efectivamente la posibilidad de una relación desde la equidad, puesto que ha sido capaz de reconocer sus miedos y limitaciones y de reconciliarse con su sombra para disponerse a vivir para los/las demás.

El artículo invita a pensar las relaciones de género junto con otras relaciones en la medida que las tres etapas (según el modelo de Richard Rohr) que se propone sean reconocidas como arquetipo válido para comprender las etapas espirituales de los varones más allá de lo que pudiera ser cualquier variable relacionada con la raza, clase social, contexto histórico…

A continuación se describen brevemente los tres ciclos mencionados.

La primera etapa del varón es la de “adquirir, lograr, superar, aventajar y morir peleando por mantener lo arrebatado a otros machos igualmente deseosos de ascender en la empresa, la política o la empresa.” (Pág. 17).

La segunda etapa “es el descubrimiento de la solidaridad, que permite hacerse al varón uno con sus hermanos y hermanas, renunciando al camino ascendente del control y la dominación. Es la búsqueda amplia por la justicia y la equidad.” (Pág. 18).

La tercera etapa “es la vía negativa, donde hay que desaprender el camino del poder, potenciar a otros, hacerse hermano de la creación, derribar barreras para ser parte de una nueva humanidad. Es ir contracorriente al camino que la sociedad y la estructura eclesial disponen para el hombre religioso, una posición de privilegios y ventajas.” (Pág. 18).

En el texto podemos destacar un nuevo elemento metodológico relacionado con la interdisciplinariedad en la hermenéutica bíblica que, junto a la psicología, busca relacionar la masculinidad como una clave importante a ser considerada en la espiritualidad. Esto apuntaría a una experiencia de Dios situada conforme al género de la persona. En esta misma línea, otro recurso a ser considerado en el texto se refiere a la observación hacia detalles narrativos y lingüísticos, que hacen del ciclo de Jacob una guía potencial del proceso al que está llamado todo varón que busca la integración de su ser. En otras palabras, a lo largo del artículo se configura una relación fundamental entre espiritualidad, masculinidad, psicología y la exégesis bíblica.

Al igual que Pinkola, Hugo Cáceres, plantea que la auténtica masculinidad está al final de un largo recorrido que cada varón está invitado a transitar con humildad y riesgo. La salud psíquica y espiritual de los hombres depende de asumir un proyecto de integración que incluye estar en contacto su identidad de varones. (Cf. Cáceres Guinet, Hugo Pág. 26)

Lo más llamativo del texto ha sido el poder corroborar una vez más hasta qué punto la “teología oficial” parece no haber penetrado lo suficiente en la definición de espiritualidad la diferenciación de sexos con las actitudes, tendencias y problemáticas que ellas implican. Me parece que ésta (perspectiva de género) es una llamada fundamental; de lo contrario, sin ella, seguiremos con un abordaje de lo espiritual que se precia de “neutral”, pero que en realidad esconde una ideología androcéntrica que necesita ser desenmascarada, deconstuida y reemplazada por enfoque más justo, equitativo e integral en relación a la persona humana.

1.02.2009

COMENTARIOS A PRIMEROS PASOS EN LA RELECTURA BÍBLICA


Semana del 29 de diciembre al 4 de enero de 2009

Cuatro ideas clave que considero fundamentales:

1. Reconocer que toda lectura de la Biblia es una relectura, un nuevo acercamiento a las Escrituras que implica preguntas nuevas que brotan de las nuevas realidades del mundo, de las situaciones, de la vida de las personas. En este sentido, el ejemplo que plantea el artículo con relación a la esclavitud me parece realmente ilustrativo:
Los dueños de los esclavos/as y también los predicadores encontraban en la Biblia un apoyo para el dominio que tenían sobre esclavos y esclavas; como por ejemplo en el texto que cito a continuación: “sométanse a sus amos con todo respeto, no sólo a los bondadosos y amables, sino también a los de mal genio. Es una gracia soportar, con el pensamiento puesto en Dios, las penas que se sufren injustamente” (1 Pe 2, 18)
Esclavos y esclavas al acercarse a las Escrituras encontraban un Dios que revela su amor hacia quienes sufren injusticia, a un Dios que se pone del lado de quienes están siendo oprimidos/as para liberarlos: “… los egipcios les amargaron la vida con dura esclavitud… He visto la opresión de mi pueblo en Egipto, he oído sus quejas contra los opresores, me he fijado en sus sufrimientos. Y he bajado a liberarlos de los egipcios… la queja de los israelitas ha llegado a mí, y he visto cómo los tiranizan los egipcios. Y ahora, anda, que te envío al Faraón para que saques de Egipto a mi pueblo…” (Ex 1,14; 3, 7 – 10).
Esta manera de acercarse a la Biblia reafirmó la toma de conciencia de esclavos y esclavas y fortaleció su protagonismo como sujetos históricos que lucharon por su liberación. Como expresa el texto leído, “hoy todo el mundo reconoce que la relectura bíblica de los esclavos fue más fiel a las intenciones de Dios que la lectura –largamente aceptada- de los dominadores.” Pero llegar a esta afirmación ha supuesto un largo y doloroso camino que todas/os conocemos.

2. Asumir que la Biblia es parte de un mundo patriarcal y androcéntrico. Y reconocer que nosotras hemos leído la Biblia sin detenernos suficientemente en esta realidad. Cosa que ha sido normal porque también nosotras somos parte de una sociedad que continúa siendo patriarcal. Me parece importante resaltar que muchas veces la enseñanza religiosa en la iglesia, en las escuelas, en las familias… se ha usado para apoyar la desigualdad que nos margina como mujeres. En este sentido subrayo la interpretación que se hace del texto Mt 5, 39 – 42 y su vinculación con experiencias tomadas de la vida de los varones:

No resistas al que te haga algún mal; al contrario, si alguien te pega en una mejilla, ofrécele también la otra. Si alguien te demanda y te quiere quitar la camisa, déjale que se lleve también tu capa. Si te obligan a llevar carga una milla, llévala dos. A cualquiera que te pida algo, dáselo; y no le vuelvas la espalda al que te pida prestado. (Mt 5, 39 – 42)

Estas experiencias no son las de una mujer de la época ya que si una mujer caminara una segunda milla con un hombre, significaría que se ofrece como acompañante sexual. Por eso es importante analizar la situación de ambos, varones y mujeres, dentro del texto. Este texto en concreto es una revolución con relación a la manera de comportarse los varones en la sociedad patriarcal de la comunidad de Mateo porque exige que cambie su conducta machista, agresiva, violenta… Si el texto se aplica a las mujeres sin más refuerza actitudes que hemos aprendido en los diversos ambientes: casa, escuela, iglesia, sociedad… actitudes que nos han excluido o marginado cuando se nos ha enseñado a no definirnos, a no protestar, a dejarnos despojar de nuestros derechos, a no decir no e incluso a ser sumisas ante el maltrato. Como dice el texto: LAS MUJERES HEMOS SIDO SOCIALIZADAS NO PARA DEFENDEROS SINO PARA SOMETERNOS. Lo mismo es aplicable para personas que en nuestra sociedad son consideradas en situación de subordinación.

En este sentido es importante también descubrir otros textos que tienen una invitación diferente para las mujeres y para quienes sufren algún tipo de opresión, como la viuda en Lc 18, 2 – 6 que lucha por sus derechos hasta conseguir ser rehabilitada, conducta no normal ni adecuada para las mujeres de su época.

3. Tener en cuenta tres ejes: el factor de clase socio-económica, el factor de raza-etnia y el factor de género. Y dentro de cada grupo étnico y de clase el factor de género. Sería simplista reducir esta manera de acercarnos a la Escritura sólo a una perspectiva de cómo viven los varones y las mujeres. La pertenencia a una raza-etnia nos configura y nos sitúa de una manera concreta en la pirámide de la sociedad patriarcal. De la misma manera lo hace la ubicación en una clase socio-económica. Desde estas dimensiones leemos la vida o dejamos que la vida nos lea. Como mujeres que queremos acercarnos a la Escritura desde otra perspectiva no podemos perder de vista el reverso de la historia, y nosotras, en este sentido, podemos retomar el Desafío III del Capítulo General: Renovar el compromiso de estar del lado de los empobrecidos/as y los excluidos/as…
Desde estas categorías o ejes nos acercamos a la Biblia para una lectura liberadora que posibilite la vida plena para las mujeres y para todo el pueblo.

4. Analizar la exclusión o marginalización de las mujeres y el desprecio de sus actitudes en los textos es importante. Es conveniente preguntarnos dónde estaban las mujeres, qué hacían en las primitivas iglesias así como reconstruir su presencia en los textos y en la historia de las primitivas comunidades. En este sentido, las invito a leer un libro de Elisabeth Schüssler Fiorenza: En memoria de ella. Y también comparto con ustedes una pintura de mujeres celebrando la Eucaristía que se encuentra en las Catacumbas de Santa Priscilla en Roma.
Giselle